sábado, 16 de noviembre de 2024

Esto es un guión?

¿Cómo puedo hacer para entenderlos?

Para entrar en alguna mente.

¿Qué más queda?

Al final solo vendrá el recuerdo de la infancia.

Prevalecerá indisoluble en mi memoria de anciana, ¿Quién sabe? Si llego.

El nudo en la garganta se hace protagonista por no sé cuantas veces ya perdí la cuenta, quizás fueron pocas, pero a lo largo de la semana se juntaron algunos nudos más. Y ahí tenes para sumar. Me hago un collar.

Hoy me pusiste límites, abruptamente. De mierda los limites. Pero límites al fin. Cuando llegan los límites de mierda el orgullo es el primer soldado que sale a combatir. Para terminar rendido, ridiculizado, pidiendo perdón, por favor no me cortes el teléfono. No me cortes. 

Me cortó.

Lo volví a llamar.

Esta sequedad en mi boca, en mi garganta. 

Este fin de año inherente a la ruleta que habita la montaña rusa de la vida y sus apuestas. 

Se sortean destinos. 

Ninguno controlable ni maleable. 

De forma cierta en su testimonio, una forma que se moldea a sí misma y nunca más vuelve a repetirse. 

¿Qué veo cuando me veo? 

¿Qué ves cuando me ves? ¿o cuando te veo?

Confusión. Loop. Que se yo.

No debí escribirle. Quedó en llamar y no lo hizo y lo reclame. Y fue una charla patética. Lo fue.

Esta todo podrido.

¿Para qué mierda le hable hoy?

¿Para qué mierda?

Para eso: la mierda.

¿Qué hago mendigando amor? ¿me queres decir que mierda hago mendigando amor? ¿Qué no sufra me dice? Qué envidia mi libertad. Ja

Si.

No sabes.

Cuanta libertad tengo.

Aprisionada en esta mente, con estos condicionamientos de mierda.

Ya no sé quién soy. Ni quien sos vos.

Tenes razón, no te conozco y no me conoces. Y por como viene la mano, nunca nos vamos a conocer.


Wet velvet

¿Y si solo tengo este enojo?

¿Y si es todo lo que soy?

Esta locura.

Intermitente.

Luego permanece.

Y permanece.

Y abrazo la soledad.

Como tantos…

Somos tantos…

Se instaló una idea. Sicótica.

Ya no más, por favor.

Quiero que se vaya.

Que deje de permanecer. Para desaparecer de una vez por todas.

Y pensé otra vez: que ridícula soy. Que patética charla. Patética.

Pero no. No soy ridícula. Ni sicótica. No estoy loca.

No soy nada, no soy la charla patética de esta tarde noche.

No soy lo que nos causa mal estar.

Entonces.

¿Quién soy?

¿Quién, me pregunto yo?

¿Yo?

¿Atman?

At man.

Si.

Al hombre.

Hombre.

¿Que ves en mi?

Nada.

¿Todo? ¿Acaso?

¿Algo?

O nada, simplemente nada.

Quizás deba re formular la pregunta.

¿Qué veo cuando me veo? ¿Cuándo me siento viva?

Con un pesar hoy, esta noche y con lágrimas aterciopeladas, que llueven mis ojos me digo, pienso: Dios me ama.

Solo Dios me ama.

Entonces, ya no estoy tan sola ¿no?

Dios está conmigo.

Dios me ama igual, aún cuando pienso que soy ridícula. Aún cuando nada vale nada.

Dios siempre está.

jueves, 14 de noviembre de 2024

La obsesión 3

Suave y abruptamente, así siento que llegó tu vida a la mía. 

Analogía extraña pero cierta. 

Algo en tus ojos, en tu rostro. Lo vi desde el principio, tu mirada me lo dijo y mi corazón en silencio te contestó lo mismo. 

Es que el tiempo nos engaña, nos dispara con ruidos y subtítulos que no nos pertenecen. Al menos no a nuestra película. 

Si discernimos entre el barullo de relleno y lo que verdaderamente dicen nuestras almas, yo creo que podemos llegar a la cumbre del amor más puro. 

Me anima pensar que estas presente y aún sin hablar a veces, yo siento tu amor, como un beso caliente al despertar, luego de una noche de sueños de almíbar. 

Si me esfuerzo un poco, todas las percepciones de mis fuerzas sensoriales recrean la alegría que haces sublimar con tu existencia en mis días, en mi camino, en este andar sin apuro, porque te encontré. O me encontraste. 

Yo buscaba otra cosa. Perdida en un sinfín de lujurias sin fundamento, desamores y descontentos. De no saber. De no querer saber. Luego de pedir saber. Y en ese hueco, en blanco, tu imagen, vos. Tu rostro. 

Sobre todo: tu esplendido ser aniñado y dulce. 

Dulce como un durazno recién caído del árbol, como ese chocolate con avellanas y arándanos que me duró cuatro días. 

Una dulzura que no empalaga, que puedo probar una y otra vez sin cansarme nunca. Así debe ser querer amar. Y yo quiero amarte. 

miércoles, 13 de noviembre de 2024

Icebarg

Y esta vida que es mía, esta vida que integra cada célula, clonando pensamientos que no sé de donde vienen, ni porque llegaron a mi mente. Como un océano abastecido de mil ríos, que al desembocar olvidan su origen y  se vuelven uno con el océano. Así me pasa cuando me enamoro. Olvido mi origen, quien soy, que quiero, y aprieto el alma para recordarlo. Por eso duele. Y hace días que mi alma quedó trancada en mi garganta y el nudo me dice que tiene algo que gritar. Y vuelvo a recordar que hay que ser inmune a las críticas y a las adulaciones. Solo sirven las palabras de amor. De la verdad que habla a través del amor indisoluble e incondicional. Esa verdad que manifiesta un abrazo sincero de alguien que te ama ¿Cómo se hace cuando pasaste toda una vida necesitando esos abrazos? Supongo que el faltante hizo que todo sea como fue. Que yo sea como soy. Sobre todo cuando me enamoro me extravío de mi misma. Y volver a mi me cuesta más de lo que quisiera. No hay inferencia esta noche. Solo intimidad con mí ser. La mirada externa de quien soy, sintiendo y queriendo vivir en paz. Saturada al colmo de pensamientos y de emociones encuentro descanso en escribir ¿Por qué pienso tan distinto? ¿Por qué a veces me justifico? ¿Por qué debería? Si justamente es eso lo que me hace tan diferente del resto. Tan volada sobre los demás. En definitiva, quien soy, es lo que soy, volada y con estas justificadas maneras que intento explicar flotando en la locura que me caracteriza y no pudiendo siquiera encontrar las palabras que describan lo que es mi mente y mi corazón. Lo que ven, es solo la punta de un icebarg bastante inmenso, colosal y aterrador. Creo que todos tenemos un poco de miedo en explorarnos ¿Quién sabe lo que vamos a encontrar? Hay algunas cosas que una vez desenterradas, no se pueden volver a esconder. 

domingo, 10 de noviembre de 2024

La obsesión 2

Desespero en el juego del amor. 

Me pierdo en pensamientos obsesivos, 

que quiero desterrar y obligar a un exilio permanente e imperecedero. 

Corro tras tus pasos, 

creyendo pisar tus huellas 

y alcanzo a encontrar solo el barro que dejan tus pisadas. 

Siento la injusticia de esta incesante mente pensante y me aferro, 

atenuando el dolor, 

con ganas, 

al pensamiento de que me amas y te amo. 

Inquieta, 

intento seguir con mis días, 

como si no fueras todo lo que abarca mi mente, 

preocupada e inestable, 

como un día soleado que comienza a nublarse. 

Repentina e incuestionablemente caigo en un dilema, 

de hacer impulsivamente algo que llame tu atención, 

pero nada sirve. 

Me niego a controlar esta situación que me es imposible retener siquiera

 y entender aunque sea un algo, 

un poquito, 

un puñado de todo lo que me decís,, 

de lo que vivimos los últimos meses. 

Ya no puedo y me niego a hacerlo, 

solo quiero ser feliz y seguir pensando que me amas y te amo.

jueves, 7 de noviembre de 2024

La obsesión

Cruce de volcanes dentro mío

Sube lava intensamente en un suspiro

Caigo abruptamente en sueño vespertino

Me arrullan sueños que al despertar olvido

 

Cesa la magia de nuestro encuentro

Y busco inspirarme en algo en que escribir

¿Será nuestro aliado el destino?

¿Habrá verdad en lo que viene?

 

Ya no sé ni lo que digo

Miro cielos irreales en instagram

Pienso que te amo y no compartí ni un desayuno con vos

¿Qué estoy haciendo?

 

Puedo hablar de botes y de orillas

De amaneceres y de dioses caprichosos

De tu alma o de tu boca sedienta de mi amor

Pero ¿Qué quiero en verdad? Quiero tu vida.

lunes, 4 de noviembre de 2024

Domingo 3

Se siguen formando imágenes con la vela derretida.

Tengo la levedad de una hoja y siento que me desprendo de tanto dolor.

Hoy 2

Hoy es lunes 4.

Me reporto desde mi cuarto.

Algo que tengo y que no es poco, un techo, mi alegría por vivir. Habitar los espacios entre segundos, como si una fibra se dispersara y disipara el tiempo y la realidad. Todo se detiene, ¿o se expande?

Logros. Logro ver ¿logro ver?

Quiero, tu boca. O ¿quiero permanecer?

Quién sabe.

¿Lo sabe?

Quién sabe…

Ja.

jueves, 31 de octubre de 2024

Jorge

 13:05pm del viernes.

Viernes 24/11/23

Son contadas pero aparecen, las pesadillas.

Digo contadas porque no frecuentan mi andar, mi reposo.

Pero anoche una particularmente molesta vino a mis sueños, al inconsciente.

A mí.

Desperté agitada, alarmada y triste.

Confundida y enojada.

Como todo: pasa.

Efusiva pesadilla, que arremetiste la paz del descanso, no pudiste conmigo.

Ayer terminé yendo a Carnal. Me escribió ella. Solo fui porque no quería que este sola con él. Pensando cosas raras fui. Lloré en los brazos de una total desconocida. No cene y toqué hora 30 de show. Fui a Carnal, lo que dije que no haría. Fui porque iba ella, no soporte la idea de ellos solos, juntos. Además, la excusa: no cené y quería pedirme unas empandas. Patético. Ayer estaba hermosa. En Carnal todos me miraban enamorados. Obvio que nos saludamos con él. Vino 1 sola vez y después el show. Lindo. Después, me fui. Le dije: chau, muy bueno el show.

Sigo tan dolida, tuve una pesadilla horrible. Horrible. Me llené de celos otra vez. Me dañan. Me lastima. Me lastimó él con su mierda de quererme como un objeto, un juego sexual, un juego de trío. No se para que mierda me metí en esa. Me lastimó con esto de: mi mujer. Sigo incomprendidamente triste y vagabunda en este sentimiento de enojo, tristeza, angustia, desplomo. Hoy me tire en la cama de cara a la almohada y me sangró la nariz de lo fuerte que caí. Se me doblo la nariz, sentí como se explotaba la vena. Me quedé sentada, pensando: cuanto me faltó, de chica. Sigo con esos pensamientos pelotudos e inútiles, victimarios, que de nada sirven. 

Ok Gaby ¿no te leyeron un cuento antes de irte a dormir cada noche? ¿No te arroparon como querías? ¿Qué necesitabas? ¿Qué te abrace mamá de vez en cuando? ¿Cada día? Lo sé. Cada día. Cada día necesité que me acaricie, que me abrace, que me ponga límites, que me lea un cuento, que me indique que si me sangra la nariz me tengo que quedar sentada, tranquila. No me indicó eso. Pero si tantas otras cosas. Me duele el pecho y ya no puedo con el pasado. Lloro genuinamente y abrazo el portarretratos en el que uní mi foto con la de Jorge…

Jorge, te tuve a vos…

No tuve cuentos antes de ir a dormir… pero te tuve a vos.

No tuve fiesta de cumpleaños y festejo con todo el salón, pero te tuve a vos Jorge.

No tuve regalos por todos lados, ni nada de todo eso que tanto envidiaba de mis compañeras, pero te tuve a vos.  Jorge, yo te tuve a vos.

No me sentí nunca cómoda en ningún lugar, siempre pensando y sintiendo que estorbaba… pero vos estuviste en mi vida y eso es lo que agradezco. A vos Jorge, si te tuve.

Duda 5

Resuelvo misterios sin precedencia.

Algo que está solo en mi mente y solamente.

Una preocupación que me ocupa.


El recipiente se amolda, las formas son filosas y pinchan.

Hay tierra para esconder la cabeza, pero no hay ganas de hacerlo.

Hastiada, suspiro.


¿Recuperaré hoy la espiritualidad?

¿O me redimiré de ella por el resto del día?

¿Será acaso?


¿Será un mejor y copioso momento alegre el venidero?

¿O las fruslerías de tu andar adolescente por el derrotero, consecuente y frágil, me harán renunciar al devenir?

Inextricable, me quiero saltear los pasos, siempre.


Siempre.

¿Cómo vivir entonces?

¿QUIÉN SABE?


Quizás vos más que yo.


Un león, un buey, mariposas, bichos carroñeros, tu mirada, intento en vano, resistir tu sonrisa, me come.

domingo, 27 de octubre de 2024

Pensamiento recurrente 10

 Lo que cuantifico se deshace y termina siendo un recuerdo difícil de añorar.

Por ejemplo

Por ejemplo ayer: 

Sentí que me vestí de tu amor y salí a la calle sin más preocupaciones que respirar el aire dulce de las flores selladas en las partículas que conforman el viento. O al revés.

¿Al revés?

Si.

Las partículas que conforman el aire se impregnaron del aroma de las flores de esta hermosa e inolvidable primavera y quedaron selladas en el viento que acariciaba mi piel, mi pelo, mis ojos, todo lo que soy se vistió de tu amor ayer.

Hoy también.

Y por lo pronto, espero, que el resto de la semana.

viernes, 25 de octubre de 2024

Sin contención 5

¿Para qué indagar?

Inquirir.

¿En qué?

¿Por qué?

LO QUE PRESIENTO, QUERRÍA NO HACERLO. PREFERIRÍA QUE SE AHOGUEN ESAS DUDAS.

O certezas. Pero para saberlo debería preguntarte con nombre y apellido. Y no voy a hacerlo. Me niego.

Esta vida que requiere ser vivida me pide que siga. Sin mirar atrás. Solo revivo o invento un pasado dónde abrazo a la pequeñita y hermosa niña que fui. Para abrazarla, arrullarla. Ver sus ojitos chispeantes de amor y de dulzura, y llorar conteniéndola. Como nadie lo hizo y como merecía.

Y ahora con lágrimas en los ojos me vuelvo a preguntar:

¿Inquirir?

¿Para qué?

¿Por qué?

Nunca más.

Todavía estoy.

¿Quién sabe?

Por cuánto tiempo más…

domingo, 13 de octubre de 2024

Lunes

La puta verga 

es lunes.

Acá 

tomando unos mates.

Acá 

retomando mi vida.

Acá 

conmigo.

El sueño de una mujer fuerte

que no fue solo un idilio

y se convirtió en sustancia permanente y perenne.

Acá 

con mi alma omnímoda.

La presencia hermosa de mi ser absoluto.

Y ese amor propio 

que subyace cada situación.

Contiene. 

Me refiero a este día

como un renacer.

Desde lo sutil e inteligente

para preservar mi integridad.

sábado, 12 de octubre de 2024

Solo una ficha

 Ahora

 

Silencio

 

Ahora

 

Silencio

 

Ahora

 

Solo silencio

 

Aliados de la luz 

vengan a mí 

acompáñenme en mi marcha infinita

Un caris importante acontece 

y la verdad del mundo conspira 

y no la escucho porque me urge el llamado del lobo que me habita

que aúlla e irrumpe en la entrada del eterno interrogatorio 

donde el bucle se enreda

y su aullido rompe todos los hilos 

para engendrar un nuevo comienzo 

lleno de olvido 

pero lleno de me acuerdo 

y lo intento una vez más

Un día caluroso 

con un final sentimiento infausto 

en mis mentes circulares 

con grietas más o menos elásticas 

para poder jugar

y quiero elegir aquel juego que jugamos 

de patear latas aplastadas 

desde Av. Libertador hasta Cabildo al Sacoa.

Punto. 

Todo tiene un comienzo, por supuesto. 

Pero a veces no es lo que pensaba. 

A veces desaparece el comienzo 

porque el nudo se hizo insoportable 

y el final es drástico 

y aburrido 

y pura y totalmente predecible.

Quien quiera que seas 

ya no te veo 

y no te escucho 

y la luz violeta me protege 

de cualquier palabra que digas 

de mi te rebota fuerte en la retina y se te acalambra alguna extremidad de solo emitir mi nombre 

así que adiós 

ya no te escucho 

ya no sabes quién soy.

Renazco desde el océano del purgarme en esta velada 

en este final 

en este último capítulo 

y estoy viva 

y logré vencer al monstruo 

y solo usé una ficha.

Volvemos pateando a Ronald y Bad Boy. 

Los dejamos que duerman entre las vías 

así juntan experiencia. 

Los buscamos al otro día, el tren los rozó y dejo su marca 

y así llevamos la marca de la experiencia de la vida hermano mío. 

Debo decir que sos el único geminiano que voy a amar en este mundo.

Adiós 

ya no me escuchas 

ya no me ves 

ni sabes quién soy.

 

viernes, 11 de octubre de 2024

Duda 4

 

AL FIN TE VUELVO A VER

NOS VUELVO A VER

MI CABEZA DICE:

¿Qué hora es?

¿Tengo permiso para ser romántica?

Hoy olí Buenos Aires queriendo recordarte, tu olor.  

No sé cuál es. 

Oles a noche, a alcohol, a cigarrillos. 

Pero lo que sería tu olor, no sé cuál es.

Pensamiento contemporáneo 8

 

NO AVERIGUES MUCHO DE ÉL

SIMPLEMENTE NO QUIERO SABER.

martes, 8 de octubre de 2024

Real

La credibilidad del alma

Yace en un suspiro

Uno de más

Cuando las palabras

se agotan

En su ensañamiento

Ya no dicen nada

Entonces

Silencio.

 

Entonces

Solo ese hueco

Y un eco sordo

De pensamientos

Que se abrazan

Queriendo desintegrarse

Y el polvo

Que todo lo cubre

También quiere

Desaparecer.

 

Lo divino

Las respuestas

El tesoro

La magia

Lo absoluto

Lo ideal

Es callarse

Por ahora

Y permanecer

En alerta

Constante

Sin parpadear

No perderse

En asuntos complicados.

 

¿Qué más?

Si todo lo hay

Todo se pudo

¿Y el límite?

Se escabulló

Y ahí esperó

A ver como lo buscaba

Y reía

Pero no hizo falta

Dios me ama

Y la alegría

Es real en su presencia.

domingo, 6 de octubre de 2024

loop

Me quedo acá, en esta sensación. Con esta tentación. De nunca saber, de nunca saber. 

¡De siempre querer!

Despiadada con el corazón. No hay razones. Y el encanto se vuelve algo más inoportuno aún. Porque la voz que escucho me hipnotiza. Un hormigueo. Que muerde todo el ser.                                                                                                    

Y es protagonista, sin actitudes. Ni rechazos, ni pensamientos, ni banalidad. Ni nada de todo eso que ya fue dicho.                                                                              

Es algo nuevo, algo que nunca sentí. Una sensación como cuando te empezas a excitar y queda ahí trabada.

En loop. 

Y queda apretando el botón de enter. Y muerde. Muerde.  Aprieta. Aprieta más. Sigue. Hormigueo.

Calma.

sábado, 5 de octubre de 2024

¿Cómo estas?

 11:57

Mismo día.

¿Y si todo lo que me queda es este dolor?

¿Qué cada vez que alguien me pregunte como estoy, se me alborote el alma de tristeza y broten lágrimas en respuesta a una tan simple pregunta?

¿Va  a ser siempre así?

¿Y si todo lo que tengo es esto?

¿Sufrir?

¿Estar enojada con el mundo por su frialdad?

Y desde mi soledad apreciar un deseo que nunca llega…

¿Cómo estás?

Me preguntan…

Como el orto.

¿Qué es lo que no estoy diciendo?

¿Qué es lo que estoy tragando? ¿Con que me atraganto?

¿Qué espero yo de este mundo?

¿Qué espero de mí?

Piedad.

Misericordia.

Solo de mi Dios. A través de las gentes que me envía.

Y esa niña…

Esa niña que fui…

La quiero abrazar…

La intento abrazar…

Es tan chiquita, tan dulce.

Y me duele. Me duele su soledad…su silencio…

Su alegría tan genuina. Tan pero tan dulce.

Un simple ¿Cómo estas…? y yo escribiendo esto porque no se que mierda responder.

 

 

Nunca 3

Creyendo y cayendo, todo se disuelve. Pero hace grumos el pensarte. Se vuelve distante y es solo responder un mensaje. Si estas en mi mente. Tengo tu piel y tus caricias todavía agotándose, reflejando todo lo que sos. En mí. Creyendo y  cayendo, vuelvo a este intento. Pero presiento el dolor y finalmente: duele. 

¿Cómo puede generar tanta ansiedad? No debería ser así, el amor. Entonces no es amor. Es solo obsesión. Creyendo y cayendo, otra vez me vuelvo al reloj para ver si estas, si respondes. Hablándote por todos los medios. Desde mi mente, a los nervios de ver si estas en el whatsapp, en el Instagram o a la vuelta de la esquina quizás sea más fácil encontrarte.

(ok me acabas de responder y me quedé sin poesía)

Cruzarte de repente y sentir que un hilo nos unió. Cruzarte otra vez y ver que el hilo todavía quería sujetarnos fuerte. Cruzarte una vez más y ya estar enredados con el hilo apretándonos.

Nunca 2

Otra vez vos.

Tanto quise la casualidad. Que quiso lo casual. Y fue causal el río que nos unió.

Otra vez.

Vos.

Y un misterio que ya resolvimos pareciera tener secretos nuevos.

Pero este juego de espías no es real.

Solo vernos. Y todo eso que sucede internamente. Muchas palabras untadas en deseo. Y silencio.

Miradas. Cercanía. Solo eso. Uno al lado del otro. Y ganas de pegarnos. Untarnos los pensamientos en la piel.

Decirnos cosas al oído. Sentirnos las manos transpiradas de agarrarse fuerte.

Nos imaginé volviendo en taxi. Tocándonos. Cada uno a su casa luego. Pero dejando el placer en un viaje compartido al barrio.

¿Che compartimos el taxi?

Nunca

 Cada segundo que pasa, las imágenes en mi mente se resumen en pensamientos.

Se desarrollan ideas o preguntas que no tienen respuestas.

Y se disuelven, pasan de largo…

Imágenes, rostros, personas.

Situaciones.

Las revivo. 

Siempre en mi mente. 

Y el corazón mira, mientras come unos pochoclos dulces.

Me da risa la situación que acabo de describir.

Los ojos queriendo llorar, queriendo reír.

Tus ojos me miran de nuevo. En mi mente. Siempre en mi mente.

El corazón se queda dormido, se aburrió de la película. Y la mente se quedó sin guion.

En un bucle.

Mis días.

Son míos.

¿Son míos?

Respiro.

Se callan las voces.

Inclino la cabeza. 

Entrecierro los ojos. 

Cambia la perspectiva…

¿Cambia la perspectiva?

¿De qué?

De todo.

De cómo me ilusiono. Como una niña.

Los ojos quieren llorar.

La sensibilidad inunda la mente y la gotera moja al corazón. Pero este abre el paraguas. Y sigue comiendo pochoclos.

Ja.

Creo que el amor propio lo tiene contento. Al corazoncito.

Se la re banca el corazón.

Se mojan los ojos. Solo eso.

El cielo nubla.

El sol. 

¿Saldrá acaso más tarde? 

¿Más temprano?

Que salga el sol.

Que haga lo que quiera. Mira si lo voy a apurar.

Como te apure a vos…

Te descubrí corazón.

Elegiste mal.

¿Elegiste mal?

Nunca.

jueves, 5 de septiembre de 2024

Existir 3

 Los instantes abruman.                                                                                                                 La lluvia cae sin cesar. O con Cesar. Que sube el pulgar y por hoy te deja vivir. 

Mi visión sobre este monitor lleno de brillo, que hoy ve, lee, resuelve y dispone a corregir algunas palabras equívocas…                                                                                                                                                                                      

Tu imagen en mi mente totalmente distorsionada.                                                                        Ya no sé quien sos. 

Mi corazón contento por la fruta que desayuna…                                                                        ¿Quién diría que un kiwi, una manzana y el jugo de medio pomelo pueden ser tan enriquecedores al alma?

Vuelvo a pensar en vos. ¿Por qué lo hago?                                                                                No sé. Siempre que lo hago tu piel tiene un tinte rosado, casi rojo. 

Tu piel…                                                                                                                                        Tu piel.

Fue todo una dulce ilusión. Difusa. De ensueño. Desgarrador sueño. En el que despierto y no es verdad. No es verdad que me amas como en mi sueño. Que me abrazas. Me besas. Como en mis sueños. 

O quizás si es real pero decidí que no lo sea porque quiero aprender a merecer más. Más que un revolcón embriagado. Que me deja manoseado el corazón. Que me mira y me pregunta ¿valió? ¿Te gustó? ¿Era lo que querías?

Escribo y grabo con la placa de sonido el sonido de la lluvia y mis dedos en el teclado escribiéndote. Describiendo lo que me pasa.

Vuelvo siempre a pensar en vos, aunque el objeto de mi pensamiento se va modificando de a poco. Poquito a poco vas yéndote. O quedándote. 

No quisiera interrumpir el sonido de la lluvia, pero igual lo hace una bocina. Y yo quiero seguir escribiendo.

A cerca de vos.                                                                                                                              Acerca de mí.

De nosotros.                                                                                                                                  De lo que fue.

Más que nada de lo quedó en mí.                                                                                                Lo que dejaste en mí: tu piel.

Lo que dejaste en mí: un beso apasionado, a mi tonto parecer.                                                  Lo que dejaste en mí: pensarte y saber que no es amor.                                                                                                               

O quizás sí. Pero ¿a quién preguntarle? ¿A Dios? Para Dios todo es amor.                                Entonces sí. Fue amor. Como dijo Fito y luego cantó Fabi. Como a veces me dijo Gabriel: a veces con el amor no alcanza. 

¿Y mi amor? A veces pienso que no te di ni un gramo de lo que soy.                                          Te di la ilusión de algo. Algo que no fue real. 

Pero ¿y si fue lo más real que hayamos tenido? Al final del camino y mirando en retrospectiva la vida, seguramente se va a haber sentido bastante real. Cada momento. Hasta aquellos que quisimos borrar.

A veces hago eso. Me adelanto y hago de cuenta que ya viví mi vida. Y vuelvo al presente. Y la vivo con más alegría. No intensidad. Sino gozo. Alegría de estar viva. 

Vuelve un estado de melancolía que quisiera evitar hasta que se desvanezca por completo y para siempre. 

Disfruto a mi amigo Horacio y los perritos que pasea.                                                                  Y pienso, algún día voy a recordar todo esto. Quizás esta plaza cambie. O quizás se mantenga intacta y pueda revivir los momentos. 

Y así me pasa con todo. 

Otra cosa que hago es, hacer de cuenta que viajo del futuro hacia mi presente. Como si me estuviera por ir de este planeta ya. Y me dijeran, te vamos a dejar volver media hora, o unos minutos, o un día. No lo sé con exactitud eso. Porque cuando lo hago y vuelvo y me encuentro en mi presente. Sea cual sea. Lo valoro mucho más. Y quizás estoy haciendo algo insignificante. Pero cobra un valor repentino hermoso. Hago eso sobre todo cuando siento que la vida es aburrida. Me inyecto un poco de ¿Cómo decirlo?: magia.

sábado, 3 de agosto de 2024

Una y otra vez

Risueño el cuento que nos contamos una y otra vez.

Y las velas que prendimos una y otra vez para conocernos, con hábito y con paciencia.

Sabiendo una y otra vez que no hay tormenta que dure un ocho perezoso.

Así, una y otra vez, las bifurcaciones del camino se preceden, como si fuese una especie de competencia.

Una y otra vez el liderazgo cae por su propio peso.

La escuela de la que salimos lo sabe y quiénes levantaban la voz, solo afirmaban su naturaleza irascible y volcánica.

Perfecto una y otra vez.

Son los tiempos de Dios, que una y otra vez, nos ponen en un lugar vulnerable y nos recuerdan que no hay separación y por eso hay que evitar la ofensa al propio ser.

Como si el cantar de un pájaro no fuera suficiente para callar los malos pensamientos, que una y otra vez deben ser silenciados con el amor y la poderosa presencia de Dios.

Como si ver una ballena asomarse a la superficie no fuera suficiente para entender la inmensidad inconmensurable de la vida en la Tierra.

Y una y otra vez seguimos en la rueda, pero si nos detenemos y nos volvemos uno con el todo, dejando a un lado la dualidad, abrazando ese intento de separación para ser amor profunda y omnímodamente.

miércoles, 17 de julio de 2024

Instante hermoso

La vida, la vida es.

¿Qué es?

Un instante hermoso.

Cualquier buen recuerdo.

Mi mente conectada a mi corazón.

Tu voz en el contestador, quizás también al oído tu voz.

El abecedario y saber cosas.

Meneo la cabeza, escucho una buena canción.

No querer irse.

La adrenalina.

Ese instante tan hermoso.

lunes, 15 de abril de 2024

"Así, de repente"

 De repente alojamos sentir

en un pequeño hueco aislado

nos besamos tiernamente

cada encuentro explotaba

por dentro y fuera 

nuestros cuerpos

habían colmado el éxtasis 

pero como repentina 

y fugaz empezó

así se fue...una noche

fue la última vez...


viernes, 12 de abril de 2024

Fragmento 4

Me quedan lo collares que, en secreto, devolví. 

Sentí un aroma del pasado, que inmortalizó mi existencia. 

Pensando en Victor

 ¿Qué será lo último que pensó?

mirando el lago, se preguntó...


Despertó esta mañana llorando

sintió la ausencia

sintió que lo iba a extrañar.


Había alegría en sus ojos

en su mirar...

miércoles, 14 de febrero de 2024

Existir 2

Cuidando cada detalle, como nunca, ahora siempre.

Aparece un sueño que cuenta una historia distinta.

Para comprender y compadecer lo que antes no existía, o no se concebía.

Retroceder para entender, para saber más, para acercarme y no restar.

Tan cerca, estaba lejos.

Caricias sobrantes, ásperas, consecutivas e imaginarias.

Absorber la personalidad envenena.

Crear la oportunidad entonces de retroceder y recuperar y asir el respeto mutuo.

Una inferencia, un pensamiento, un momento, nada más.

jueves, 8 de febrero de 2024

Existir

Una tenue luz se hizo brillante

maravilloso fulgor

extenuante frenesí.

 

Una rama de un árbol cicatriz

las líneas que surcan el rostro

y el espejo devuelve justicia e injusticia.

 

¿Quién más vendrá?

el carro parece marchar solo

¿quién más lo verá?


Preside la noche

un cuadro en la retina

imágenes eternas.

 

La dulzura predomina

como la vitamina en la cáscara

no quieras pelarla tan deprisa.

 

Si somos dos

¿qué más da?

solo si somos dos.

 

Y aullar se vuelve rutina

un hábito subrayado a color

el alma como inferencia.

 

Inspiración ¿dónde estás?

ebria camina en zigzag

derramando la tinta en el papel.

 

Cuento los días

sin querer

acomodando momentos en estantes.

 

¿y si la luz se apaga?

solo somos dos

seguimos siendo dos.


Es repentino

sucede nomás

existir.

Lluvia

 

Llueve torrencialmente y me animo a escribir un poco. Las calles se están limpiando y las mentes sucumben al ruido blanco. Socavar en el porqué de las cosas ya no tiene éxito. La motivación confluye hacia la evolución de algo más. Todo puede ser, y va a ser. Lo que no, sucumbirá. Pero en el devenir de los tiempos se avecina una fe omnímoda, que en la heterogeneidad de la incertidumbre, muestra valor, calidez y compasión a los deseos puros del alma.

Llovió para reírse a carcajadas. Mojarse. Disfrutar. Casi arruino el momento queriendo filmar una historia para el Instagram, pero recordé que no podía, me robaron ayer el celular. Y yo me guardé este momento en mi corazón.