En medio de la ciudad
una luna asoma entre edificios.
Mientras,
ella,
dialoga con pájaros,
mientras,
lo simple la entristece.
Mira hacia arriba,
esa luna trae agua,
cae de lo alto;
una lluvia de paz.
Hubo un tiempo sin reloj,
de hamacas oxidadas y de sol.
No te vayas,
como el viento,
podemos recordar,
lo bueno.
O que una vez,
distraída ella bailó.
Imágenes aparecen en su mente
y su solitaria sonrisa despierta.